Un lobby y un restaurante se han convertido en los refugios más cálidos de Andorra. Entre las actividades deportivas, de relajación y saludables, que se practican en el entorno, el hotel Park Piolets Mountain, aporta un ambiente distendido y acogedor, que envuelve a sus visitantes.
Los lobbys, tradicionalmente vestíbulos de los hoteles, se han convertido en plazas centrales lúdicas, donde el tránsito de público propio del establecimiento, no impide que se transforme en un lugar de relajación, encuentros, intercambios e incluso “co-workings” improvisados. Esta función del lugar de entrada del hotel, donde se sitúa la recepción, se ha establecido los últimos años como una de la principales tendencias de los hoteles urbanos y también en zonas de vacaciones y de recreo en el mundo.
El restaurante del Park Piolets Mountain, el KAO Soldeu, es otro exponente de tendencias, cocina asiática entre pistas de esquí y paisajes nevados, a modo de extensión de la montaña, un verdadero refugio lleno de calidez y sorpresas gastronómicas. Además de los colores azulados y verdosos en la atmósfera destaca el mobiliario ligero sido diseñado por el estudio de interiorismo casi en su totalidad, excepto las sillas de madera de la firma Vergés, diseñadas por Andreu Carulla. Destacan las butacas de terciopelo, así como las mesas de mármol y hierro, o las de madera, también diseño propio. La iluminación es sobre todo puntual, con lámparas de mimbre sobre cada mesa, acompañadas de apliques Wally de Santa & Cole.
Pilar Líbano ha sido la diseñadora elegida para desarrollar su mirada de experimentada profesional, tanto en la renovación de su lobby, como el diseño del restaurante. Una interiorista con muchos años de recorrido, que trata los espacios con soltura, agilidad y su línea definida de trabajo, tanto en oficinas, viviendas, espacios públicos, como tiendas y galerías de arte.
La vida del deporte de montaña, esquí, excursiones, recorrido de caminos de paseo para descubrir el paisaje son las actividades que realizan los viajeros que llegan al Park Piolets Mountain Hotel & Spa, una cima alcanzada de distensión y evasión.
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