En una casa antigua situada en el casco antiguo de Sevilla, se encuentra un hostel que, debido al cumplimiento de los ciclos de obsolescencia estética y la consecuente disminución de su capacidad de venta, requería una intervención para revitalizar su espacio. El objetivo principal de la reforma era atraer a un nuevo público y aumentar el RevPAR (Revenue per Available Room).
La intervención se centró exclusivamente en la reforma del lobby y la entrada principal del hostel, sin modificar la distribución original del espacio. Se trabajó en la renovación de los elementos clave de la recepción, incluyendo el mostrador, la iluminación y la decoración del área.
Los acabados principales que protagonizaron la intervención fueron la pintura, el uso de papeles vinílicos y la incorporación de carpintería de madera con molduras decorativas. Estos elementos no solo modernizaron el ambiente, sino que también mantuvieron la esencia del espacio, respetando su carácter histórico y aportando frescura y elegancia al entorno.