El objetivo del estudio era reorganizar una vivienda antigua en nuevos espacios adaptados al uso de una vivienda vacacional, manteniendo la esencia de la casa y su vínculo con el mar. Ubicada en un lugar privilegiado de la Costa Brava, la casa contaba con elementos antiguos que establecían un estrecho diálogo con el entorno. El reto consistía en ejecutar una reforma integral que equilibrara modernidad y tradición, partiendo de espacios antiguos y mal estructurados. El proyecto de diseño buscó ser respetuoso con la tipología de la casa, los elementos originales, el lugar y la utilización de elementos de diseño km0 o con la mínima emisión de residuos.
En la planta baja encontramos la cocina, un espacio abierto rodeado de ventanas y realizada en colores blanco y arena con encimera de solid surface, se conecta directamente con un amplio balcón lateral. El salón-comedor cuenta con una chimenea de obra, un espacio de trabajo con cubeta de obra, y puertas de madera maciza de teca. Las ventanas distribuyen el espacio, y un mueble a medida en hierro blanco y negro en la zona de la chimenea. También en la planta baja, encontramos dos habitaciones pequeñas, cada una personalizada con un cabecero blanco, una característica circunferencia pintada en la pared y una ventana. Bajo la escalera y frente a la entrada, se encuentra el baño principal, que cuenta con una amplia ducha y un mueble de madera que aprovecha el recodo de la escalera.
La suite de la planta superior tiene una gran ventana circular de madera que da al mar. Originalmente, una puerta corredera cubría la ventana para oscurecer la habitación, el reto fue camuflar este mecanismo sin ocultar la belleza de la ventana. Se logró integrando estantes retroiluminados y un área de asiento bajo la ventana, sin ocultarla. Las puertas del vestidor, en madera blanca con paneles de ratán semi acristalados, ocultan el baño y crean un ambiente cálido con su iluminación interior. El techo, con vigas de madera y lamas blancas a dos aguas, se extiende a la habitación y el baño. Un banco de trabajo recuperado sirve de soporte para dos lavamanos con espejos circulares y cerámica blanca en las paredes, junto con un suelo hidráulico en tonos grises.