PARADOR DE LEÓN

Al ganar el concurso para la reforma del Parador de León, el estudio Merry se enfrentaba a un gran reto: convertir un edificio que aparece en los libros de historia, el convento de San Marcos, en un hotel de lujo. El estudio se encargó de la total remodelación del edificio, exceptuando los espacios más históricos, que se conservaron en su esencia lo máximo posible.

El estudio Merry Design Studio, con Alfonso Merry del Val al frente, se ha encargado de la reforma integral de este edificio, colaborando con el equipo de decoración de Paradores, que con su experiencia y profesionalidad, ha ayudado a integrar la gran colección artística que poseen al diseño interior. Se han recuperado más de 600 piezas de mobiliario y mas de 500 obras de arte, no es habitual participar en un proyecto con estos parámetros. También ha sido toda una experiencia y un reto par el estudio, al desarrollar un proyecto como este durante el confinamiento, y solamente con las visitas de obra justas y necesarias.

Obras de arte y piezas de mobiliario recuperadas

La nueva decoración del Hostal de San Marcos está centrada en el confort y el lujo español. “Un hotel de cinco estrellas significa servicio, confort, bienestar y una experiencia única” que Paradores ha vinculado siempre a “ un juego entre lo histórico y lo contemporáneo, con un lenguaje propio que habla de España, su cultura, su arte, su artesanía, y su carácter acogedor a la medida de las exigencias de los clientes”. El estudio ha apostado “por el lujo de la sencillez sin estridencias y la calidad de los materiales a través de diseños de origen español, respetuosos con el medio ambiente, y que ponen en valor el buen hacer y la innovación de proveedores españoles con el objetivo de reforzar el vínculo entre Marca España y Paradores. En palabras de Alfonso Merry: ” Hemos intentado llevar a cabo un proyecto que conecte con la ciudad de León, que es quien más lo va a disfrutar”

Mobiliario histórico y contemporáneo

En las habitaciones, se ha elegido una paleta de color más neutra, pero en las zonas comunes, adquieren más protagonismo los tonos azules claros. Diseñadas a partir de dos modelos según la tipología de la habitación, los cabeceros de las camas combinan elementos recuperados y elementos actuales. Algunos cabeceros son piezas singulares, como por ejemplo el que se ha creado con dos puertas de madera en casetones, originales del Parador. Otros más actuales, se han tapizado con tela vinílica de alta limpieza y resistencia.

Cabeceros singulares creados con piezas históricas

En los pasillos, se ha colocado hasta un kilómetro de alfombras diseñadas por el estudio, concretamente por Paul Heredia. Y en el zaguán, podemos ver los muros de piedra, lámparas de techo y farolones originales del Parador. La escalera principal es el espacio más amplio, con paredes blancas y techos abovedados. Es un espacio impactante en el que se han creado contrastes de colores mediante el azul y el mostaza. La alfombra que la cubre también es un diseño del estudio, y la gran lámpara es original. Se completa con zonas de estar y mesones de madera también originales del Parador.

Escalera principal

En la sala capitular destacan los muros de piedra y el increíble artesonado de madera. Las mesas con espejo, son diseño de Merry Design Studio, reflejando así el techo en su superficie. En la cafetería, el espacio del nuevo atrio, el techo es también el protagonista. Realizado por Lucio Muñoz, el resto de los elementos no deben competir y por eso se integran con sencillez y calidez . Se trata de un espacio sobrio con diferentes ambientes, en el que el azul es el protagonista en el mobiliario. La decoración está vinculada también con la obra artística contemporánea que cuelga de las paredes. Como cuentan desde el estudio: “Lucio Muñoz nos ha marcado mucho. Hemos podido reeditar una tela  de los años 50 de Arcadio Blasco, coetáneo de Muñoz y el resto de artistas contemporáneos que encontramos en San Marcos”.

Techo de la zona de cafetería realizado por Lucio Muñoz

El restaurante cuenta con ventanales en arco, abiertos al exterior a una gran terraza con vistas al rio que cuenta con dos ambientes, y en la que se ha apostado por tonos verdes. La luminarias de pared son piezas muy originales, creadas a partir de tallas de madera existentes. El desayunador es un espacio fresco, en el que encontramos una exposición de artesanía de barro de Jiménez de Jamuz, y en el que adquiere gran protagonismo la cortina del comedor. La biblioteca es una zona con más intimidad, en la que podemos encontrar expuestos dos cantorales y una colección de libros de arte. Una ventana con arco de medio punto ofrece al huésped una vista de la iglesia.

Sofá chester original del Parador en la biblioteca

El Hostal de San Marcos “es arte en sí mismo” y, por ello, la iluminación es clave para vivir su monumentalidad en el interior y es necesario crear una escenografía contemporánea acertada, que permita apreciar los elementos arquitectónicos históricos. Por este mismo motivo, durante la reforma, los espacios con más valor histórico se conservaron en su esencia todo lo posible y se pusieron en valor.

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