La historia de la ciudad de Málaga se remonta a tiempos de los fenicios, lo que la convierte en una joya cultural que rezuma leyendas por cada una de sus calles. Esto hace que sea una ciudad muy especial, donde son capaces de convivir multitud de referencias arquitectónicas con manifestaciones artísticas de todos los tiempos. Y eso es lo que, de alguna manera, ha intentado reflejar Merry Design Studio: todo el encanto de Málaga.
Icon Malabar se ubica en el barrio del Soho, uno de los más alternativos y modernos de la urbe sureña, en un edifico de fachada decimonónica con las típicas balconadas acristaladas, de cuatro alturas y exento, esto es, que ocupa toda una manzana lo que contribuye a que todas las estancias gocen de abundante luz natural.
Una de las principales aportaciones de Merry Design Studio al proyecto fue el cambio de la entrada principal, que antes estaba en la calle Casas de Campos, y ahora se encuentra en la calle Tomás Heredia, lo que ha permitido dar amplitud a las zonas comunes, compuestas por un gran lobby central, dos patios, una terraza a la calle y un bar cafetería, además de construir un hilo conductor en torno a la vida de Tomás Heredia Livermore, gran comerciante malagueño que llegó a ser el primer ferretero español durante el siglo XIX.
Colonialismo y obras de arte
De entre todas las influencias que se pueden encontrar tanto en el hotel como en la ciudad, está el estilo colonial de la época, que Merry Design ha tratado de plasmar, de manera muy eso sí, con el uso de maderas tratadas, también en las molduras maravillosamente trabajadas, en los ventiladores de techo de los pasillos y las habitaciones, y sobre todo en las obras de arte y su forma de tratarlas, pues aunque están inspiradas en el ayer, se ha jugado a actualizarlas con un toque de humor.
Otro elemento que ayuda a unificar y que juega un papel fundamental en el estilo y el interiorismo del hotel son, sin duda, los colores. Se ha apostado por los tonos más neutrales y tierra, una paleta que, además, ayuda a generar la buscada atmósfera de serenidad que se respira en todo el hotel, además de dotar de holgura y cierta ligereza a las habitaciones, en las que hay que destacar los armarios semiabiertos y los cabeceros en biombo, ambos diseñados a medida por el propio estudio.
Con Málaga de protagonista
En su firme propósito de contextualizar la experiencia hotelera, Merry Design Studio ha impreso en Icon Malabar la huella de las distintas civilizaciones y culturas que han pasado por Málaga, con múltiples referencias que no pasan desapercibidas a los ojos de los más atentos observadores. En un paseo por el hotel es posible encontrarse unos ojos fenicios representados en forma de espejos, también ornamentación de origen cartaginés y romano, así como distintos diseños geométricos que aluden a la Málaga andalusí tanto en los suelos, marcando la transición entre espacios, como en las paredes de sus dos impresionantes patios.
El objetivo desde el primer momento fue convertir un antiguo convento, pues antes tuvo un uso residencial, en un hotel de lujo que pusiera el foco en unos interiores muy trabajados y llevaran el mensaje intrínseco de hacer veladas y continuas referencias a la ciudad. Entre los diseños, que evocan materiales cerámicos y maderas artesonadas, hay también alguna referencia al cubismo en blanco y negro del malagueño más internacional: Pablo Picasso. En un pequeño patio central y con una preciosa fuente como protagonista, los azulejos de suelo y pared parecen sacados de cualquiera de su época más oscura.
En definitiva, el Icon Malabar, que es el nuevo cuatro estrellas de Hotelatelier, es un hotel completamente integrado en la ciudad, con reminiscencias a su herencia cultural y artística e inspirado en el lisfestyle de la sociedad burguesa y en el estilo colonial vigentes durante la industrialización de Málaga en el siglo XIX. Todo un acierto, sin duda.