El reto principal del presente proyecto radicó en la rehabilitación integral de una antigua bodega con más de 150 años de historia, la cual, pasaría a tener un uso residencial. La recuperación de este edificio y su diseño interior evocan la esencia de la casa andaluza.
Otro de los retos fue el hecho de buscar una sinergia entre los materiales recuperados, los nuevos revestimientos propuestos, el mobiliario, la iluminación, los textiles, la vegetación, etc. La combinación de estos elementos son los que nos trasladan a mencionada esencia de la casa andaluza.
Sin embargo, se quería conseguir una visión contemporánea del espacio, por lo que se diseñaron elementos de mobiliario a medida, como por ejemplo, el mostrador, en el que se usaron motivos geométricos de las baldosas hidráulicas recuperadas en el espacio de la recepción, con lo que se consiguió esa simbiosis entre diseño y esencia. También son ejemplos de ello el diseño de la barra del bar, el modo de abordar el amueblamiento de todos los espacios y la carta de color. Todo ello hace que combinen a la perfección la esencia andaluza y la contemporaneidad en todo el hotel, con armonía y sin “ brusquedad visual”.